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Durante los primeros días del mes, el trabajo era, como siempre, aburrido y cargante (salvo cuando tenía oportunidad de mangar un cacaolat del hotel y tomarlo arriba con un chipicao, ese era mi momento filix el día...
Luego, con parte de mi primer sueldo, me compré un portátil, y todo en el trabajo fue viento en popa... Es curioso, me prohíben llevar la DS porque jugaba, y ahora juego descaradamente en el portátil, y no me dicen nada... El portátil funciona que te cacken.
Durante el principio del mes también cometí algunos actos delictivos en el trabajo con mi cómplice, Diana, la recepcionista, que es una especie de yo, pero mas mayor (y en mujer, evidentemente). Por ejemplo, cuando no había nadie en la recepción, escaneamos nuestras caras en la fotocopiadora. Cuando nos aburríamos jugábamos al este Street Fighter en minijuegos, o escuchábamos a los Scorpions si no echaban nada decente en la radio (Yeah!).
Desde que tengo el portátil hemos pasado del Street Fighter anterior, porque me he bajado todos los Metal Slug, y nos hemos puesto a viciar como posesos a TODOS. Todos los días, cuando salgo, bajo con el portátil y nos pasamos un Metal Slug, lol.
Cambiando radicalmente de tema, fuera del trabajo y todo eso, mi tío por parte de madre, Carlos, y su mujer, Lucía, han ido a Etiopía a recoger a su hijo, ¡Mi primo! Es majísimo, tiene cuatro años y es bastante guapete... vaya, es casi triste que los más guapos de mi familia sean adoptados: Mi hermana y mi primo.
En fin, y como superúltima noticia que acabo de recibir hace 15 minutos: ¡DP y Álvar se han hecho un blog conjunto! Es éste: Atropello con fuga
En fin, las últimas noticias son éstas... ¡Nos leemos!
Auf Wiedersehen!
EDIT:
Paso de crear una nueva pestaña, pero me he fijado en que no habia puesto la Superputada que me hicieron los de Monbus, además he de revelaros una información sin duda indispensable para la supervivencia de la humanidad...
Empiezo por la Superputada... Veréis, estaba yo, inocente de mí, esperando la parada del autobus, confiando de nuevo en ser recogido y, tras los trámites capitalistas, acordar con el proletario encargado del transporte público que me dejase en la parada mas cercana a mi humilde morada, cuando al fin vi aparecer al susodicho medio de transporte público. Inesperadamente, éste se digno a parar ante mi persona, y yo, emocionado, subí y le ofrecí una generosa fracción de mi capital, consistente en exactamente un euro con ochenta céntimos. Mas, ante mi sorpresa y admiración, el proletario al cargo del transporte rechazó mi humilde dinero, ofreciendome sentarme y pagarle despues, porque el se encontraba observando un papel mientras conducía, tarea esa de leer y conducir resultábale harto compleja, así que permitióme subir al autobus sin trámite financiero alguno. Mas, cuando yo, pecador de mí, me hallaba en un remolino de confusión y alegría, el conductor frenó el autobus, y anuncio que éste, no se dirigía a mi pueblo, sino que giraba 180º al llegar a una rotonda situada unos kilómetros antes de mi patria península. Halleme entonces en un estado iracundo y acusador, señalando al temerario y descarado proletario como villano e ignorante. No obstante, mis acusaciones e improperios de nada sirvieron, pues tanto a mí como a una humilde señora, que había subido antes que yo con la intencion de ir a parar al mismo lugar, nos hizo descender grácil y rápidamente por la escalera del autobus, y allí él, descarado de sí, partió sin más preámbulo.
Yo halleme en desesperación, y recurrí a mi último recurso, la cabina telefónica. Encima llevaba 3 euros, y la vil máquina encontró oportuno arrebatarme 2 de estos euros sin permitirme llamar, afórtunadamente y para relajar mi desesperación, hallé en la tercera llamada el consuelo necesario, proveniente de mi humilde progenitor. Éste sentenció que vendría a buscarme y demandaría a la cruel empresa por su deleznable trabajo al abandonar a sus clientes.
Así termina la anécdota de la Superputada.
Bien, cansado me he de redactar tan pulcra y cultamente, así que... MIERDA! Agh, por fin, es que ya me había acostumbrado... El mensaje, ahora lo importante es el mensaje que he de entregaros, ignorantes humanos... Hoy he encontrado este mensaje en mi correo electrónico, proveniente de mi alter ego, mi yo del pasado:
Querido yo del futuro:
Diana me ha encargado que te envíe el archivo adjunto, sobre un tema de vital importancia, para que te encargues de comúnicarselo al resto de la humanidad por medio del blog, recuerda que, sin este archivo, la humanidad se encontrará indefensa frente a la futura rebelión de melocotones y peladillos (es decir, melocotones metrosexuales).
Cuento contigo, destruye este mensaje despues de leerlo. Que la fuerza te acompañe.
Fin del Mensaje.
Resulta que los melocotones y los melocotones depilados (o peladillos), están conspirando contra la humanidad... el archivo adjunto es el siguiente, mostrando la diferencia vital entre una foto con y sin flash:
Aquí termina la edición, mantened los rifles cargados, me despido por segunda vez.
Auf Wiedersehen.
